lunes, 29 de marzo de 2010

TURISTAS


La idea para este post me ronda desde que hace unos días escuché a Josh Rouse -adoro su pop suave e intimista- charlando con Pedro Blanco, en ese progama, el suyo, en el que a cada cosa se le da el tiempo que requiere. La charla giraba en torno a su último disco "El turisata", grabado a lo largo del año largo que lleva comiendo paella en Valencia.
Fue una charla interesante, en la que Rouse, autor de álbumes sublimes, como su "1972", se sinceró hasta el punto de reconocer que, desde que vive en España, la disciplina con la que había trabajado hasta ahora se ha diluído con costumbres tan españolas como la de beber un buen vino suemre que se pueda o dejarlo todo para mañana.
Su álbum español, "El turista" no es, desde luego, lo mejor de su producción y, sin embargo, se acerca al encanto de los anteriores gracias a curiosidades como su devocional acercamiento al mítico "Bola de Nieve".
Aquí podéis ver y escuchar a Josh Rouse paseando por Barcelona mientras suena su "Quiet Town" o interpretando el "Mesié Julián" de Bola de Nieve en el concierto del Joy Eslava, ante un público que, por lo que parece, nada sabía del genial mulato cubano catalán.



Josh Rouse - Quiet Town / Mesie Julian - A Take Away Show from La Blogotheque on Vimeo.

La verdad es que, ya desde los tiempos del dictador, España fue destino de muchos y muy interesantes músicos de todo pelaje. Que yo recuerde tuvimos a un joven y ya gamberro Rod Stewart, detenido y expulsado aplicándole la "ey de vagos y maleantes", a un John Lennon viviendo con Yoko Ono en Almería mientras rodaba con Lester, al malogrado Warren Zevon residiendo en la costa Brava o a los mismísimos Pink Fñoyd que, ya sin Syd Barrett, pero aún en plena psicodelia, pusieron música a "More", algo así como "La conquista del Oeste" de los hippies, con los viejos molinos de viento de Formentera al fondo.



También la isla de Formentera fue base de operaciones para los geniales King Crimson que llegaron a tener su propio estudio en ella. Una isla que dejó huella en ellos y a la que dedicaron uno de los mejores temas de su álbum "Islands", "Formentera Lady"



La lista sería interminable y pasaría por el Leonard Cohen enamorado de Lorca y Granada o el genial Leonard Bernstein poniendo sus dólares para rescatar la vieja judería de Girona.
El último ejemplo ha sido quizás el del no menos genial e introvertido Howe Gelg, alma y algo más de los Giant Sand, que, cansado quizá de su desierto de Tucson, ha dado con sus huesos y su guitarra en España, donde ha grabadocon Raimundo Amador, entre otros,  su álbum "Alegrías", que ha firmado como Howe Gelb and a Band of Gypsies. Y, a pesar de que ceo que aún no está a la venta, aquí va un adelanto.


Uneven Light of Day ("Alegrías", Howe Gelb & A Band of Gypsies) from eureka music on Vimeo.

jueves, 25 de marzo de 2010

EL REY DE LA JUJU


Cuentan las crónicas que, a la muerte de Bob Marley, los directivos de Island Records buscaban un artista de lo que entonces se llamaba “música del Tercer Mundo” –todavía no se había adoptado el más correcto de World Music lanzado unos años más tarde por Peter Gabriel, entre otros-. El energético Fela Kuti acababa de firmar por Arista y de ahí que se “fichase” al Eto’o de la música nigeriana: King Sunny Adé que rápidamente popularizó la “Juju Music” a principios de los 80 en las pistas de baile de Nueva York y Londres. La música “Juju” –pronúnciese yu-yu- no da miedo. Por el contrario, el ritmo peculiar de este tipo de música de origen Yoruba trasladado a las guitarras eléctricas apoyadas por los “talking drums” y sintetizadores genera una atmósfera similar a la del funky. Nadie puede dejar de bailar.




Esta actuación de 2009, en Seattle, es el último “come back” de King Sunny Adé & His Africans Beat, el único músico africano nominado dos veces a los premios Grammy. Nacido en Nigeria hace 64 años en el seno de una familia real –de ahí el apelativo King-, Sunday Adeniyi –su verdadero nombre- fue el primero en introducir la steel guitar y el wah-wah en el pop de su país, donde es una estrella y un emprendedor hombre de negocios. Como sucede también con otros músicos africanos como Youssou N’Dour. El caso es que en su dilatada carrera –ha publicado 133 discos- hay de todo, como este simpático vídeo que recuerda a las misas de Harlem –salvando la distancia atlántica-…



Los Talking Heads no pueden ocultar su influencia en sus composiciones de finales de los 80 y esta influencia se puede ver de manera más reciente en los nuevos grupos de la escena neoyorkina como Vampire Weekend



Quizá por ellos, Adé vuelve a estar de moda y el año pasado estaba grabando un nuevo disco de estudio en Filadelfia. Música divertida y bailable. Por algo le llaman el Ministro de la Diversión ¡Qué más se puede pedir!

domingo, 7 de marzo de 2010

POR CIERTO...


...el Preservation Hall es cómo la Meca para los musulamanes o el Vaticano para los católicos. Cuando tuve la oportunidad de visitar Nueva Orleans, estuve en este local cochambroso. Es cómo para un niño visitar Disneyland. La reacción fue tan impresionante que en los muros de mi salón tengo colgadas algunas litografías de bandas de jazz que tocan en el Preservation (y no es broma). Es más, en Bruselas había un local de dixie al que llamaban el Preservation Hall y en el que se podían beber unas magníficas cervezas. Mariés y yo íbamos con frecuencia. En especial cuando venían amigos de España. La magia del dixie no tiene comparación. Es algo mágico. Aunque no hay que olvidar que se trata de música para blancos...

Me sumo a la demanda de Hernández. Hay que comprar este disco.

SALVAR EL PRESERVATION HALL

El "dixie", esa primitiva forma de jazz proveniente sin apenas evolución de las bandas de música que acompañaban los funerales en la ciudad de los billetes de diez dólares  bilingües , ha sido para muchos -no negaré que para mí también- la puerta de entrada al jazz.
Y, si el "dixie" es el pasaporte para ese largo viaje, su capilla sixtina es un destartalado local del barrio francés de Nueva Orleans, lugar de cita obligada para quienes visitan una de las ciudades más hermosas y peculiares de los Estados Unidos, Nueva Orleans, castigada duramente por la furia del "Katrina" y la incompetencia de la ya felizmente superada administración Bush.
Años después de la retirada del Katrina, sus principales víctimas siguen siendo las clases humildes, especialmente de los barrios negros, la música que da sentido a la ciudad, las viejas glorias del jazz y del blues que sobrevivían a orillas de los turistas que la visitaban ayer mucho más que hoy, , sobre todo, la música.
Uno de los lugares más afectados, que poco a poco, intenta resurgir de la ruina en que lo dejaron el agua y el barro es el Preervation Hall, un curioso local conservado "tal cual", desde hace décadas para que nada ni nadie osen arruinar la mágica acústica del recinto que se ha mantenido a salvo de materiales sintéticos, aires acondicionados o ruidosos ventiladores.
Ir al Preservation Hall era, para quienes allí acudían, una rara sensación que llevaba el paraíso a los oídos y el infierno al resto del cuerpo, porque el calor, la humedad y la cercanía del resto del público, apretado de modo incraíble, sólo eran soportables con la fe del converso.



Ahora, para devolver el Preservation Hall a lo que fue, ha nacido ua hermosa iniciativa en forma de doble disco -hay una edición reducida- en el que más de una veintena de músicos de la talla de Tom Waits, Ani DiFranco, Angelique Kidjo, Richie Havens, Andrew Bird, Pete Seeger, Merle Haggard y un largo etcétera, con joyas como la sorprendente Amy Lavere, han unido sus voces y sus instrumentos a la banda del local, la famosa "Preservation Hall Jazz Band" para grabar "Preservation: an album to benefit Preservation Hall and Tthe Preservation Hall Music Outreach Program". Un disco doble o sencillo que puedes pedir sencillamente como "Preservation" o descargarlo de webs comerciales, con permiso de la SGAE, que no siempre lo da, aunque pagues. Pero ese es otro cantar.
Aqui va el clip de promoción del álbum para que os hagáis una idea de lo que podéis encontrar en él.



No dudéis en comprarlo, es una buena iniciativa y, sobre todo, un buen álbum. Magnífico diría yo

sábado, 6 de marzo de 2010

POR CIERTO...

Más que interesante tu recomendación de Mose Allison. No cabe duda de que es uno de los pilares de esa música que tanto nos gusta a tí y a mí. Todavía recuerdo ese disco homenaje grabado conjuntamente por el león borrachín de Belfast, Georgie Fame y el propio Allison. En aquella época me acercaba a la zona mas blues de Van Morrison y me encontré con el tesoro de la voz y la música de Mose.
Ese instante tuyo de 82 años que, como te digo, también es mío y, como dices, lo es de mucha más gente, aunque lo ignore, me ha hecho recordar otros instantes de un hombre bueno, aunque a veces incapaz de dominar al hijo de puta que todos llevamos dentro, religioso y progresista a un tiempo, que siempre supo estar al lado de los caídos para ayudarles a levantarse de nuevo. Lo sabe muy bien Steve Earle y lo saben muy bien todos los que alguna vez le han necesitado para llevar un poco de música y bastante ácido a escenarios hasta entonces insólitos como las prisiones.
Pero ese hombre bueno e irascible, atrapado por los demonios del alcohol y la culpa, que a punto estuvieron de negarle la felicidad, tuvo un final tranquilo en el que le acompañó la inteligencia musical del productor Rick Rubin quien supo sacar lo mejor del viejo Cash, poniendo a su disposición un catálogo de hermosísimas y atípicas canciones, junto a un plantel de, tan magníicos como heterogéneos, músicos, dispuestos a dar su mano derecha por tocar junto al patriarca.
El resultado son seis magníficos álbumes, con un extra de himnos religiosos, indispensables en la discoteca de cualquiera que ame la música. Una colección de canciones que Johnny Cash lleva a un terreno que no es el suyo ni el de la propia canción y que, sin embargo, provoca el silencio, la introspección y quién sabe si alguna lágrima en quien las escucha. Son seis joyas de las que la última acaba de salir al mercado con el rostro de un Johnny Cash dentón y risueño de apenas ocho años como portada. El álbum, amén del título lógico y ya legendario de "American Recordings VI", lleva como subtítulo el de ésta, la primara de sus canciones, "Ain't no grave".



Escucharle, con esos arreglos a un tiempo ricos y sutiles, es como escuchar música del más allá

martes, 2 de marzo de 2010

POR CIERTO...


...a veces los periódicos te dan noticias agradables. Como un concierto gratis a los pies de la Torre Eiffel de la que se considera nueva alternativa del soul británico ante la renuncia de Amy Winehouse. Se llama V.V.Brown y Los Angeles Times y The Independent la consideraron como artista revelación en 2009, a raíz de la publicación de su primer y por el momento único album.
Exactamente no hace lo mismo que Amy. Su música es definida como retropop con mezcla de rock independiente. En los vídeos oficiales parece una cantante más de R&B, pero su voz te dice que es capaz de ir más allá como demuestra en esta grabación acústica patrocinada por una conocida marca de gafas de sol.

VV Brown from Ray-Ban Rooms on Vimeo.


A mi me parece que está bastante bien. Se notan sus raíces jamaicanas y portorriqueñas. Habrá que seguirla con atención y ver si no se queda en "una aspirante más", aunque esta actuación en el programa de la BBC de Jools Holland promete...

De Eric Bibb, qué decir, un ¡chapeau! tan grande como los que suele usar. Tengo todo lo que me he podido procurar de él y aunque hay discos que son un poco demasiados líricos para mi gusto, tiene otros magníficos como el "A Ship Called Love".