martes, 29 de junio de 2010

EL REVERSO TENEBROSO DE CARLA


El mundo de las "top-models" está lleno de mujeres fascinantes. Por sus cuerpos esculturales,por su fotogenia, por sus escándalos e, incluso, por sus otras actividades artísticas. Carla Bruni ha demostrado que se puede tener éxito cantando como un gatito susurrando, pero no es la única.
Karen Elson (Manchester, enero del 79) es una modelo que en el mundillo es conocida por el sobrenombre de "el fantasma que camina". Nada edificante, por cierto. Pero ha ha hecho de defecto virtud para hacer una canción que habla del mote y que da título a su primer trabajo: "The Ghost who walks"...

Elson es la compañera del rockero Jack White (de los White Stripes), que -como se ha podido comprobar en el anterior vídeo- vela por el producto de su chica aunque la promoción atestigua que todas las composiciones son de ella. Algunas muy interesantes como "Lunasa o "Cruel Summer"...

Con esa mezcla de country crepuscular y de neo-cabaret, me recuerda a su colega Cat Power, de quien no me resisto a dejar aquí su actuación en directo hace dos años para la cadena francesa Canal+...

miércoles, 23 de junio de 2010

POR CIERTO...

...en la común búsqueda que hemos emprendido sobre los valores "ocultos" de la chanson y tras haberme sorprendido gratamente con Yves Jamait, una artista singular ha llamado a mi puerta esta mañana: un artículo en el diario `Liberation´da cuenta de la iniciativa de una cantante de llevar su repertorio a una fábrica de coches que se encuentra en el ojo del huracán siempre que hay un plan de ajuste en la compañía. Se trata de ocho mini-conciertos (unos a la hora del almuerzo) y otros a la salida para "acariciar" los corazones de los obreros. Algo parecido a lo que sigue...

La cantante en cuestión es de izquierdas y no se ajusta a los cánones estéticos que nos impone la "dictadura de la banalidad" en la que nos encontramos. Se llama Juliette: voz cantarina y verbo afilado que no olvida ni muchos menos que para hacer una buena canción hace falta una buena melodía, como confesaba en una entrevista a un programa local de televisión al poco de sacar en 2008 un nuevo disco: "Le Festin de Juliette"...

¡Deliciosa la manera de echar de menos al amante que te ha dejado por la ausencia de ronquidos a tu lado! Juliette Noureddine, admiradora de Piaff, admira jugar con las palabras y quebrar las convenciones. He aquí su gran canción: "L'Eternelle Femenin" o "Patronne"...

Y el último video "pour la route" -como dicen aquí-, este dúo con Adamo que demuestra que Juliette es mujer de cabaret...

martes, 15 de junio de 2010

POR CIERTO...

Por cierto. Después del gran hallazgo que fue el descubrimiento de Allain Leprest, yo también he buceado en la red a la búsqueda de nuevos valores de lo que un día fue la chanson y hoy no sé cómo denominarlo.
Lo más aproximado que he encontrado ha sido Jean Guidoni, un tipo con un registro parecido al de Charles Aznavour que en 1976 estuvo a punto de representar a Francia en Eurovisión y que se encontró a si mismo años después en uns espectáculo a propósito de la poesía de Fassbinder. Aunque, a mi modo de ver, la chanson ha de ser menos pretenciosa de lo que la hacen Eric Lareine o el propio Guidoni, éste último sí se aproxima al espíritu de los versos de Prévert. Con el tiempo, Guidoni se ha ido "intelectualizando" hasta el punto de publicar hace siete años una primera novela autobiográfica: "Chanter, n'es pas jouer". También ha editado un álbum dedicado a Prévet, cuyos versos ha recitado, además,  en un álbum colectivo en homenaje al poeta. Así suena Guidoni cuando se atreve con el mismísimo Trénet.



El segundo hallazgo, previo incluso al del propio Leprest es el curioso Yves Jamait, a caballo entre la chanson y el manouche, que, acompañándose del acordeón o la guitarra y con un registro de voz cercano esta vez al de Maxime Le Forestier, nos transporta a los años más gloriosos de la música francesa. Con su pinta de "apache", vestido con su inseparable gorra gorra y con tirantes, está en la lista de amigos de Allain Leprest, con el que ha compartido estudios de grabación y luces de escenarios. Nacido en Dijon, de Jamait se dice que es un poeta cercano al existencialismo que toma sus emociones de lo cotidiano.



Otro por cierto... Conocía a "The Black Keys", no así sus dos últimos discos, y coincido con tu diagnóstico. Cada vez estoy más convencido de que al igual, aunque mejor sería decir al contrario, que en el caso del flamenco y la América Hispana, el blues ha sido uno de esos "cantes de ida y vuelta" nacido en lso campos del sur de los EE UU, puesto en valor por los rockeros británicos y devuelto con fuerza a su lugar de origen, aceptado ya por la mayoría blanca.

FABER

Inquieto donde los hubiese, Fabrizio de André, Faber, fue uno de los personajes más complejos de la música y la poesía italiana del pasado siglo.
Hijo de un partisano comunista y comunista el mismo, nació en 1940  en Génova, en pleno fascismo y a poco de estallar la II Guerra Mundial. Fue por eso que no disfrutó de la presencia de su padre, refugiado en asti, hasta el final de la misma.
Curisoamente, Faber, como era conocido entre sus amigos, se relacionó, siendo apenas un adolescente, con poetas, músicos y algún director de cine, personajes que, como Luigi Tenco, el cantautor que se suicido despueás de estar apunto de ganar el Festival de San Remo, tendrían una enorme trascendencia en la vida cultura y la música de los convulsos años sesenta en Italia.
Amante de la música y de la poesía, intérprete aficionado de violín en grupos de jazz, Fabrizio de André colgó sus estudios de Derecho para entregarse de lleno a sus dos pasiones: la música y la poesía, a las que, desde su rebeldía, dio alguna de sus más bellas páginas, como esta impagale "Bocca di rosa".



Seguidor, como la mayor parte de los cantautores europeos de su generación, del francés Georges Brassens, tradujo al italiano alguna de sus canciones, como "El gorila" o "Morir por las ideas". Del mismo modo, quedó cautivado por Dylan y, sobre todo, por Leonard Cohen, con el que compartió su curioso mundo de prostitutas y místicos,
Fabrizio de André vivió también enredado en todos y cada uno de los dialectos que se hablan an los pequeños rincones de Italia en que vivió Desde su Génova natal hasta la isla de Cerdeña, donde vivió algún tiempo y donde, durante semanas, estuvo secuestrado por una mafia local. El genovés, el sardo o el siciliano, son dialectos que aparecen en sus canciones, especialmente para dar voz a las víctimas de las injusticias que denuncia o para exaltar la sabiduría del pueblo llano, frente a la prepotencia del poder.
Precisamente una de sus creaciones más conocidas, incluida en la banda sonora de "El Padrino", "Don Raffae", está cantada en siciliano.



A lo largo de su vida, murió en 1999 a causa de un cáncer de pulmón, grabó numerosos álbumes, algunos escritos como un todo en torno a determinados temas. También colaboró con otros autores, entre los que destaca Francesco de Gregori, al que muchos consideran su sucesor y bautizan como "el príncipe".
Su discografía no siempre ha sido accesible desde Españae. Afortunadamente, hoy es posible, a través de Internet, acceder a ella, especialmente gracias a una exhaustiva recopilación, accesible en muchas de las tiendas virtuales.
El que puede cosiderarse su testamento musical, editado en disco y DVD, es un cuidado directo, en el que hace un repaso a lo mejor de su carrera sobre un escenario repleto de buenos músicos y buenas voces. Un concierto del que el tema "Dolcenera", mezcla de sabores a veces folk, a veces latinoamericanos y a veces africanos, es una excelente mustra.



Su muerte, en 1999, en Milán, donde fue hospitalizado después de tener que interrumpir su ultima gira, supuso una gran conmoción en toda Italia y a sus funerales asistieron miles de personas de todo el país y de todas clases sociales.
Poco después de su desaparación, el mundo de la música italiana le rindió homenaje en un concierto que ha sido publicado en disco bajo el título de "Faber, amico fragile", al que no faltó nadie, desde Gino Paoli y Ornella Vanoni, a Celentano, pasando por Zucchero. Su amiga Mina no estuvo, aunque ya había dejado testimonio de su admiración, grabando junto a él, meses antes de su muerte, la preciosa "Canzone de Marinella"

lunes, 7 de junio de 2010

RADICALES... PERO MENOS


"Todo disco de blues y de rock posterior a 1972 es vomitivo" dicen que asegura Dan Auerbach, guitarra y líder de The Black Keys. Un dúo de Ohio cuyo curriculum resumen en el siguiente vídeo...

Hay cierta radicalidad en el mero hecho de ser una formación atípica: guitarra y batería y en la afirmación inicial que sugiere un esfuerzo en guardar el tarro de las esencias. Al escucharles por la primera vez me vinieron a la cabeza otros grupos singulares como Morphine -saxo, batería, bajo- y Jon Spencer Blues Explosion, por la rugosidad de la guitarra, pero los referentes son los de Jimmy Hendrix, Led Zeppelin, T-Rex y hasta The Beatles, de los que hacen una versión del "She Said, She Said" en su primer disco "The Big Come Up": básico y directo...

Su colaboración hace dos años con el productor Danger Mouse en "Attack & Release" -en el que participó poco antes de su muerte el controvertido Ike Turner- les proporcionó una mayor singularidad y la verastilidad de mantenerse fieles al rock & blues de finales de los 60 y principios de los 70 e incorporar sonoridades propias del hip-hop o el pop. Además de influencias, ahora se codean con Beck y Ganrls Barkleys. Aquí les tenemos en el show del Buenafuente estadounidense: David Leterman...

El último disco "Brothers" está francamente bien, pero me empiezan a asaltar algunas dudas sobre el marketing que rodea al dúo: la portada parece hecha por y para subnormales y el vídeo del primer sencillo -como se decía en nuestros tiempos- es un tanto sospechoso...

¡A disfrutarlos mientras duren!